Sesudos y minuciosos
Cada vez es más fácil encontrar sesudos y minuciosos análisis en blogs escritos en español, que no castellano, de las obras de bastantes formas artísticas, especialmente cinematográficas y música tanto popular como culta. Paralelamente se difunden estas mismas obras de manera masiva, en algunos casos, por la red sin pagar royalties ni derechos de autor. Esta doble presencia se ha convertido en un mecanismo de adquisición de cultura maravilloso pero ilegal.
Los museos, los teatros, el cine, los conciertos siempre han tenido un precio, a no ser que estuviesen subvencionados, para aquel que ha querido disfrutar de ellos, al que por cierto cada vez se le identifica más con el término consumidor.
La tele y la radio en cambio aparentemente nunca ha costado nada a cambio de soportar interrupciones y cortes publicitarios.
En las bibliotecas tampoco se ha cobrado la entrada ni se ha pagado un canon de uso, aunque este sistema parece que hoy se encentra en cuestión y revisión.
1 comentario:
osea que ahora se defienden los derechos ya no de autor sino del distribuidor o el comerciante, cosa rara porque los contenidos son distintos a las mercancias culturales, la lógica de tal tipo de economía es perversa, por un lado son bienes universales y por otro objetos de culto y de consumo de lujo. Que hay que pagar si, pero noe obligatorio, por otro lado la relación de valor y de función son distintas, creo que la difusión de la cultura debe subvencionarse como parte de la producción de identidad nacional, pero al tiempo permitir que se desarrolle sanamente un mercado del espectáculo.
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