Difusión Difusa

miércoles, junio 13, 2007

Saquemos a la niña del infierno

Ayer vi Tideland.
No me pareció lenta.
Ni larga.
Más bien bastante sencilla, directa y coherente en sí misma.
Encontré la puesta en escena de una contención modélica, para lo que podía esperarse.
Sólo la pasión por la taxidermia me resultó un recurso fácil, metido con calzador.

¿Qué está construida con referencias ya utilizadas y, algunas, demasiado vistas? Pues me temo que sí.
¿Qué el epílogo salvador derrumba el edificio construido a lo largo del metraje? Pues también, pero, por lo visto, había que sacar a la niña del infierno.
La pregunta clave sería: ¿realmente, estaba en el infierno?

No hay comentarios: